Nelson Kamo
Es bien sabido que en el sistema capitalista predominante en casi todo el mundo prevalece lo que el filósofo alemán Carlos Marx definió como “lucha de clases”, es decir, por un lado una minoría que se apropia de la riqueza generada por el trabajo de la masa asalariada y, por el otro, una inmensa mayoría que para poder sobrevivir está obligada a vender lo único que tienen, su fuerza humana de trabajo, a uno o varios patrones a cambio de unas migajas como salario.
En México, para consolidar el régimen de explotación colonial sobre el pueblo conquistado, Hernán Cortés, después de la caída de Tenochtitlan en 1521, impuso la religión católica, el amor a Dios y, copiando los sistemas de orden económico y explotación que los españoles impusieron en Cuba, pone en vigor “La encomienda”, odiosa formula de explotación humana muy similar a la esclavitud.
Luis Araiza señala como la primera huelga en México la ocurrida en 1582 en la Catedral Metropolitana cuando los trabajadores de la música enfrentaron al Cabildo para protestar por sus bajos salarios; posteriormente en varias ocasiones grupos de trabajadores se rebelaron contra los patrones también a causa de los bajos salarios y, además, debido a los malos tratos.
En nuestro país, para defenderse de la violación a los derechos laborales, la Constitución de 1917 reconoció la creación de los sindicatos, organismos con personalidad jurídica mismos que la Ley Federal del Trabajo (LFT), promulgada en 1931, define en el artículo 356 de la siguiente forma: Sindicato es la asociación de trabajadores o patrones, constituida para el estudio, mejoramiento y defensa de sus respectivos intereses. En los artículos posteriores se establecen los lineamientos a seguir para la constitución de sindicatos.
Pues bien, en este marco jurídico-laboral, resulta que en Jalisco un grupo de aproximadamente 40 trabajadores mejor conocidos como “Servidores de la Nación” fundaron el Sindicato Nacional de Servidores de la Nación, lo anterior debido a las numerosas irregularidades observadas en el trabajo. Según el Sol de México / Canal 44; denuncian los Servidores de la Nación que han trabajado en condiciones extremas, incluyendo jornadas largas sin apoyo adecuado y traslado forzado a Guerrero sin viáticos, bajo amenaza de perder su empleo.
La reacción de la 4T no se hizo esperar y al estilo propio de la arrogancia empresarial reprimió inmediatamente a este grupo de trabajadores despidiéndoles de su empleo. Leamos la siguiente nota de Ricardo Alemán en el portal La otra opinión: “Denuncian que el Gobierno Federal despide a Servidores de la Nación que crearon un sindicato para exigir trato digno. Sucedió en el estado de Jalisco, mismo lugar en el que protestaron más de 100 personas debido al despido injustificado y sin derecho de liquidación que sufrieron. Los manifestantes aseguraron que tuvieron represalias debido a que formaron el Sindicato Nacional de Servidores de la Nación. La Secretaria General de este sindicato, Marcela Martínez Sandoval, compartió que a ella y sus compañeros los despidieron debido a que crearon este sindicato para exigir un trato digno durante el desarrollo de su trabajo. ‘Nos corrieron por exigir derechos laborales y un trato digno’: Martínez Sandoval”.
Hasta el momento, 40 personas integran el sindicato y lo crearon debido a las irregularidades que vivían durante el desarrollo de su trabajo. Los Servidores de la Nación que protestaron denunciaron las condiciones extremas, como jornadas largas y traslados forzados y bajo amenaza.
“Yo iba a cumplir 6 años junto con mis compañeros, nosotros empezamos entregando los apoyos casa por casa, de 8 de la mañana hasta que acabáramos 10 o 12 de la noche a veces porque las personas no las encontrábamos, después nos pusieron a entregar tarjetas, hacíamos llamadas, todas las actividades que aquí se ocupan en Bienestar nosotros las sacamos adelante. Con la desgracia de Guerrero a muchos servidores y UVAS (Unidad de Vinculación Institucional) les exigieron ir a Guerrero, a ellos no les importó si tengo hijos, dónde los voy a dejar: la amenaza era vas a Guerrero o te quedas sin trabajo, por tanto, se fueron sin dinero ni viáticos y con comida echada a perder, en condiciones inhumanas”, dijo la Secretaría General del Sindicato. Los trabajadores aseguraron que “sólo les notificaron de su despido por teléfono, sin llamarles para firmar algún documento y sin darles su liquidación correspondiente”
Ante los sucesos narrados en los párrafos anteriores, nos queda una lección; no nos alegramos de la mala suerte que corrieron los “Servidores de la Nación” pues siendo fieles trabajadores al servicio de la 4T, ésta demostró una vez más, en los hechos, que la muy sonada frase de “primero los pobres” es otra de sus mentiras para atraer a las masas.
Reflexionemos. Para la diputada morenista Araceli Ocampo Manzanares: “Los trabajadores Servidores de la Nación son el pilar de la justicia social de esta etapa de la llamada Cuarta Transformación. Son ellos quienes llevan la entrega a millones de beneficiarios que habían sido olvidados durante décadas por los anteriores gobiernos en regiones urbanas y rurales. Si a los servidores de la nación, siendo leales trabajadores de la 4T, les pagan con el despido, ¿qué le espera a la clase trabajadora que no milita con Morena?”(Las negritas son mías).
Como podemos ver, la clase trabajadora tiene que alzar la voz y organizarse en sindicatos que hagan valer sus derechos laborales, solo unidos tendrán esa fuerza que los haga salir avante.