Nataly Barrera
Aguinaldo, de acuerdo a la Real Academia Española, significa regalo que se da en navidad o en la fiesta de Epifanía; tiene su origen en Roma y trataba de representar al tradicional obsequio o paga extraordinaria de forma anual por la celebración de la Navidad. Esta tradición también se frecuentaba en la cultura celta, cuya costumbre era conocida como “eguinad” y obedecía a la creencia de que los mejores augurios para el año venidero se atraen con generosos regalos. Los celtas vivieron a lo largo de Europa en la edad de hierro, intercambiaban dátiles y frutos secos como muestra de satisfacción y deseos de buena suerte.
La palabra latina que designa el aguinaldo es strenna o strena, cuyo primer significado es presagio o pronostico y luego se acostumbró a acompañar con regalos para simbolizarlos, para desear el inicio de un nuevo año. En Roma esta tradición se generalizó e incluso se institucionalizó la costumbre. Tenían culto a Strenia, la diosa de la buena salud y la buena suerte. El origen del aguinaldo se remonta a la iniciativa de Rómulo, uno de los fundadores de la ciudad.
El aguinaldo es una de las prestaciones más esperada por los trabajadores, en México se estableció legalmente en 1970, mediante la modificación al artículo 87 de la Ley Federal del Trabajo (LFT), este pago se debe cubrir antes del 20 de diciembre de cada año y el monto mínimo debe de ser de 15 días por un año de trabajo, si un trabajador lleva menos del año se le debe dar la parte proporcional.
Pero lamentablemente en los hechos no es así, aunque el aguinaldo está protegido por LFT, no siempre se cumple, los datos revelan lo siguiente: de acuerdo a la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares 2022 del Inegi, solo el 52 por ciento de la población ocupada y remunerada recibe aguinaldo en el país y va en aumento, el 19 de diciembre del 2023, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, la proporción de trabajadores que, pese a tener un empleador, no recibe el pago de aguinaldo, equivale a llenar 173 veces el estadio azteca .y el Inegi de 2023 muestra que cerca de 14.4 millones de personas con un empleo subordinado no recibieron aguinaldo
Estos datos demuestran una de las injusticias laborales más frecuentes. Desde la perspectiva de Abigail Quiroz Vargas, presidenta de la Fundación Trabajo Digno, uno de los factores que explican este problema es la vinculación con los esquemas de contratación que se usan al interior de la formalidad para evadir obligaciones patronales; otro factor es que trabajamos bajo esquemas atípicos, personas que somos contratadas por asimilados o salarios o prestaciones de servicios, ya que bajo el amparo de estas figuras civiles o fiscales, se le cambia el nombre al trabajador para justificar la relación con otro esquema y negarle las prestaciones; y el factor más común es la irresponsabilidad y soberbia de los patrones.
No olvidemos que es un derecho, y si no recibiste tu aguinaldo, exige y acude al Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral para obtener una cita de preconciliación, donde te darán fecha y hora en la que acudirá el representante legal de la empresa y tú, con un funcionario de conciliación que jugará solamente el papel de neutralidad ante los hechos, tendrás la oportunidad de narrar el tiempo que has prestado tu servicio como trabajador en dicha empresa y la respuesta que has obtenido en el área de recursos humanos, de tu supervisor o del patrón, según sea tu caso, también tendrás que entregar tu propuesta que tendrá que ser realizada bajo el artículo 87 de la LFT, en muchas ocasiones no se concilia en la primer cita y el representante de la empresa se lleva la propuesta y les agendan otra cita, donde presentan la respuesta a tu propuesta la cual no se puede conciliar por un monto menor del que establece la ley.
De esta forma se llevan a cabo las citas de preconciliación donde todas tus prestaciones se pueden exigir. Y la única que se puede negociar a un porcentaje menor es la indemnización, esta se cuantifica por noventa días y se puede conciliar a cuarenta y cinco días. Tenemos un año para pelear la prestación de aguinaldo, vacaciones, prima de antigüedad y vacacional y solo dos meses la indemnización que a esta tienes derecho cuando existe despido injustificado.
Como vemos, no es tan laborioso exigir nuestros derechos y aunque no cambia al cien por ciento nuestra condición, ayuda a que, como trabajadores, seamos menos burlados y que recibamos un poco de la riqueza que producimos.